Entró en escena cuando el reloj aún no había dado las nueve de la mañana y quince minutos después ya había desaparecido. El zarandeo que le dio Carles Puigdemont este jueves a la política catalana duró el mismo rato que un recreo. Llegar,…
Entró en escena cuando el reloj aún no había dado las nueve de la mañana y quince minutos después ya había desaparecido. El zarandeo que le dio Carles Puigdemont este jueves a la política catalana duró el mismo rato que un recreo. Llegar,…