“Las dos palabras más bellas de nuestro idioma no son ‘¡te quiero!’, sino ‘¡es benigno!”. Esta frase que Woody Allen pronunciaba con su habitual verborrea en Desmontando a Harry podía sonar a parodia en 1997, año en que se estrenó la película que…
“Las dos palabras más bellas de nuestro idioma no son ‘¡te quiero!’, sino ‘¡es benigno!”. Esta frase que Woody Allen pronunciaba con su habitual verborrea en Desmontando a Harry podía sonar a parodia en 1997, año en que se estrenó la película que…