Sorprende que en un país como Brasil, todavía sin hacer y en el que puede haber mucho espacio para la épica y para una narrativa de la masa y la exterioridad, abunde la literatura de la intimidad concentrada, de la intimidad esencial. Pienso…
Sorprende que en un país como Brasil, todavía sin hacer y en el que puede haber mucho espacio para la épica y para una narrativa de la masa y la exterioridad, abunde la literatura de la intimidad concentrada, de la intimidad esencial. Pienso…