Los bustos de Adriano y quien fuera el miembro favorito de su séquito, Antínoo, conviven en la sala 74 del Museo del Prado de Madrid. La voluntad del emperador se sigue cumpliendo 19 siglos después de la muerte de ambos. Cuando su joven…
Los bustos de Adriano y quien fuera el miembro favorito de su séquito, Antínoo, conviven en la sala 74 del Museo del Prado de Madrid. La voluntad del emperador se sigue cumpliendo 19 siglos después de la muerte de ambos. Cuando su joven…