Quizá, en la época del “no me da la vida”, “estoy muerta” y “no puedo más” aliarse con la cara de cansancio es la opción más sensata. The New Yorker acuñó este estado general como El gran agotamiento en el artículo Un año…
Quizá, en la época del “no me da la vida”, “estoy muerta” y “no puedo más” aliarse con la cara de cansancio es la opción más sensata. The New Yorker acuñó este estado general como El gran agotamiento en el artículo Un año…