Pocas certezas había en la vida de la ucrania Oksana Fomeniuk desde que Rusia invadió su país. Pero de algo sí estaba segura: en el hospital donde cuidaba de su hija Solomiya estarían a salvo de las bombas. Y ya llevaban casi tres…
Pocas certezas había en la vida de la ucrania Oksana Fomeniuk desde que Rusia invadió su país. Pero de algo sí estaba segura: en el hospital donde cuidaba de su hija Solomiya estarían a salvo de las bombas. Y ya llevaban casi tres…