En 1988 una niña de 10 años presentada como Pili Sánchez sacó un disco de sevillanas llamado Gracias Madre. Su voz tenía fuerza, su presencia también, pero su nombre no tanto, al menos para el productor Luis Sanz, descubridor de artistas como Rocío…
En 1988 una niña de 10 años presentada como Pili Sánchez sacó un disco de sevillanas llamado Gracias Madre. Su voz tenía fuerza, su presencia también, pero su nombre no tanto, al menos para el productor Luis Sanz, descubridor de artistas como Rocío…